Helado de aceite de oliva

El maestro heladero español Luciano Borón ha elaborado un helado natural y "saludable" con el aceite de oliva virgen extra aprovechando los aromas a frutas verdes, hierba y tomate que distinguen al virgen extra de la variedad de "aceituna arbequina", por lo que esta "cremosa" creación aspira a convertirse en la "estrella" de este verano no sólo por su "sabor afrutado" sino también por su bajo contenido en grasas.


Así lo ha explicado el propio artesano heladero quien ha manifestado que tras varios años de "bastantes pruebas" con diferentes aceites de oliva virgen extra ha conseguido con la cosecha que elabora 'Basilippo' hacer un "helado exquisito" que se caracteriza por su "poca acidez" y su aroma "muy dulce con sabor afrutado" que, a su juicio, "recuerda al sabor de la hierba recién cortada".


En este sentido, ha asegurado que este helado "caza muy bien con otros sabores". Entre ellos, ha destacado los afrutados como el plátano y el kiwi, o cualquier variedad de chocolate.
En cuanto a este helado, que ha englobado dentro de la línea "gourmet", ha dicho que al paladar es una "suave crema" que no incluye ninguna grasa saturada ni nata en su elaboración. "La única grasa que contiene es la propia dada por el aceite de oliva, por lo que no es láctea", ha asegurado, y ha añadido que sólo "el nueve por ciento de grasas ha sido suficiente para darle un sabor estupendo".
Asimismo, ha insistido en que es "muy agradable" al paladar y cada persona aprecia su matiz particular. De hecho, si para este maestro heladero la crema de aceite de oliva "recuerda a la hierba recién cortada", para otros es el "agua de tomate" el sabor más característico del helado.
Dentro de esta línea gourmet, ha destacado también otros sabores de nueva creación como el helado de gazpacho. "Un helado muy veraniego y completamente natural elaborado con verduras frescas y siguiendo la receta típica andaluza", ha manifestado. Eso sí, Borón ha querido darle "un toque más internacional" y le ha añadido "un veteado de vinagre balsámico de Módena".

Para los más atrevidos, ha rescatado de "una antigua receta de los conquistadores españoles" el helado de chocolate picante en el que se mezclan especias con la acidez propia del "intenso y característico" sabor a chocolate.

Por último, ha querido recordar la "cremosidad" del helado Mascarpone, elaborado a base de "semilla de calabaza salada y girasol, con un veteado de dulce de leche".